Este año, cumple cuatro décadas formando a las nuevas generaciones. Y todos los meses protagoniza una de las actividades culturales más atractivas de Valparaíso, en la cima del cerro Concepción. Específicamente, en una construcción neogótica que fue declarada monumento nacional en 1979: la Catedral Anglicana Saint Paul’s.

Allí, una vez al mes, el organista Italo Olivares Cañete (1956) ofrece un recital dentro del ciclo Música en las Alturas.

La Catedral Anglicana Saint Paul’s, que fue diseñada por William Lloyd, quien vino desde Inglaterra para construir el ferrocarril de Valparaíso a Santiago, y financiada por una colecta en el seno de la comunidad británica en el puerto. Una iglesia cuyos vitrales fueron importados desde Reino Unido. Allí, una vez al mes, Olivares vuelve a darle vida al órgano que desde 1903 vive en ese templo, fabricado por Robert J. Craig-Christie e instalado en memoria de la reina Victoria. ​

Italo Olivares, quien estudió en la Universidad de Chile y es además discípulo de la reconocida maestra Montserrat Torrent, acaba de graba un disco que será lanzado el jueves 15 de junio. Se titula Hitos Sonoros: Órgano en Chile y es una producción de Acéfalo Records. Olivares Cañete lo presentará con música en vivo en el mismo instrumento en el cual lo grabó, en la Parroquia Lourdes de Viña del Mar (San José Oriente 72, esquina Agua Santa), a las 19 horas y con acceso liberado.

Radio Beethoven conversó al respecto con el reconocido organista y formador de nuevas generaciones.

¿Cómo nació la idea de grabar este disco?

«Es un proyecto que me gané por el Fondo de la Música del Ministerio de las Culturas y las Artes y el Patrimonio, conjuntamente con Luis Álvarez y con Rodrigo Leiva, quienes fueron los gestores también del proyecto. Rodrigo Leiva fue alumno mío y es profesor de la Universidad Técnica Santa María y Luis Toto Álvarez es músico más bien de rock y tiene un conjunto; ya ha hecho varios discos y ha ganado varios proyectos también». 

¿Fue muy complejo decidir cuál repertorio grabar?

«No. Yo traté de abarcar todo el repertorio, y en el órgano lo que más se da es la música barroca y la música romántica, entonces puse música barroca alemana y puse también español del Barroco temprano. Del Romántico también puse dos autores».

O sea, tiene harta variedad estilística.

«Claro, sí, harta variedad estilística. Lo principal es dar a conocer el órgano estupendo con el que contamos en la grabación del cedé, que es el órgano del Santuario de Lourdes de Agua Santa en Miramar».

Hablemos de ese órgano, como instrumento, primero en sus implicancias sonoras. ¿Ese órgano permite interpretar obras muy distintas, un repertorio amplio?

«Claro, ese órgano permite toda la literatura organística, ya sea música del Renacimiento, barroca, clásica, moderna y contemporánea, es decir, puede abarcar todos los períodos porque tiene muchos registros que se pueden aplicar para toda la música en general».

¿Alguna de las obras o alguno de los autores que grabó es más querido para usted? 

«Como siempre, mi autor favorito es Bach, y por eso puse tres obras de Bach en el cedé».

¿Por qué lo conmueve tanto Johann Sebastian Bach?

«Bueno, desde chico he sentido admiración por este gran compositor; abarca todos los instrumentos y es admirable la pedagogía musical tan grande que hizo a través de sus hijos, así como la hermosura de todas sus obras».

Hablemos del órgano del Santuario de Lourdes en el que grabó el disco. ¿De cuándo es, cómo es?

«Es de una fábrica de órganos que hubo en Santiago, de Orestes Carlini, que hizo varios órganos que están alrededor de todo Chile. Este órgano lo hizo él. Después este órgano fue ampliado, se pusieron registros nuevos por un organero de Estados Unidos que vino, que se llama John Moir, y lo amplió. Hasta el momento está operativo, es decir, se ha reparado, ha estado en mantenimiento y es el mejor órgano tenemos en la ciudad de Viña del Mar. Tiene más de mil tubos y 23 registros».

¿Originalmente cómo fue diseñado y para cuál repertorio fue ampliado después?

«Este órgano fue construido en 1920 y ampliado fue en 1977. En la registración del órgano hecha por Carlini no abarcaba registros de mixtura ni lengüetería más amplia, por eso es que se agrandó y se amplió por estos registros nuevos. Ahora permite tocar todo el repertorio, pero antiguamente no se podían tocar muchos barrocos porque no tenía mixtura, no tenía el registro propio del Barroco y también le faltaba mucha lengüetería, ya sea el registro de trompeta, de clarión. Ahora, este órgano tiene dos registros de trompeta que son estupendos, y tiene clarión, entonces se amplió mucho su repertorio».

Es interesante que este órgano cuente con mantención en forma permanente, algo que lamentablemente no es tan común en nuestro país.

«Claro, sí. Los padres pasionistas se han interesado mucho por preservar este instrumento valioso que tiene la iglesia y se han preocupado. Tanto los padres anteriores como el de ahora, el padre Luis, que también está muy interesado en que se mantenga y que se preserve el órgano».

¿Usted ha tocado varias veces este órgano de los padres pasionistas?

«Sí, he tocado varias veces. Antes, conciertos auspiciados por el Goethe, el Instituto Alemán, y también por la Corporación Cultural de Viña. El último concierto que di fue el año pasado, un concierto de Semana Santa auspiciado por la organería Valdebenito, que es la que repara el órgano, y otras entidades. Pero siempre se está haciendo actividad musical en este instrumento». 

En abril del año pasado, en su anterior concierto en el Santuario de Lourdes de Viña del Mar, Italo Olivares interpretó el Adagio de Tomaso Albinoni, la Meditación de la ópera Thais, de Jules Massenet y un homenaje a Cesar Franck con la gran Pieza Heroica, además de varias piezas de Johann Sebastian Bach: el Adagio en La menor de la Tocata y Fuga, cuatro corales del Orgelbüchlein relacionados con Semana Santa y la Fantasía en Sol menor. Ya entonces Italo Olivares destaca que era una «oportunidad de oír un gran órgano, un hermosísimo órgano con el que cuenta la ciudad de Viña del Mar y que fue restaurado por Carlos Valdebenito. Realmente tiene una acústica fenomenal» (ver nota aquí).

¿Entonces usted diría que este órgano en particular tiene una vida, pues está siendo utilizado en forma permanente? Esa sería una buena noticia porque hay muchos órganos que han sido abandonado en nuestro país.

«Claro. Litúrgicamente, se ocupa para los matrimonios, funerales, y misas con órgano cuando se pide. Se está usando constantemente y conciertos, como le digo, por lo menos hay unos dos o tres conciertos en el año».

¿Es fundamental para ustedes haber contado con este órgano para el disco?

«Sí, es fundamental, y con la participación y el apoyo de los padres pasionistas que nos permitieron hacer varias sesiones de grabación. Para grabar un cedé se necesita mucho silencio y grabar varias veces, y en todo eso contamos con el apoyo de la congregación de padres. Así que eso fue estupendo».

¿Qué va a interpretar en el lanzamiento del disco Hitos Sonoros: Órgano en Chile?

«En el cedé son ocho obras y voy a tocar seis en el concierto».

¿Cómo pueden los auditores acceder al disco? ¿Estarán disponibles ese día para la venta?

«Sí, ahí van a estar disponibles para la venta los discos y también si quieren que los firme. Yb después, a través mío o de los gestores, igual que por Spotify y todas esas plataformas».

¿Quisiera invitar a los auditores de Radio Beethoven al lanzamiento?

«Los invito cordialmente a participar en este concierto. Acá en la quinta región es la primera vez que se graba un cedé de órgano, y el programa es bastante atractivo, con música barroca y romántica, así que están todos cordialmente invitados con entrada liberada para este concierto que es el jueves 15 a las 19 horas en el órgano del Santuario de Lourdes de Miramar, en Agua Santa, en Viña».

El valioso instrumento fue reinaugurado a fines de 2016, después de nueve meses de restauración a cargo del organero Carlos Valdebenito, discípulo del organero francés Jean-François Dupont. El órgano de la Parroquia Nuestra Señora de Lourdes es el segundo más grande de la Región de Valparaíso. Fue construido por Orestes Carlini en 1921, época en que surgía con fuerza una nueva tendencia en Europa: se redescubrió el órgano barroco y los instrumentos empezaron a reducirse. Pero el organero italiano no siguió la moda, sino que continuó construyendo instrumentos romántico-sinfónicos.

Antes de la restauración, reveló entonces Carlos Valdebenito, «el órgano estaba en un 40% de funcionamiento, siendo generoso. Los órganos se echan a perder por dos razones: la dejación de los dueños y las malas intervenciones. Aquí ocurrieron simultáneamente las dos». Ocho de los 25 registros habían sido muy maltratados, y el mayor daño estaba en los pabellones de afinación. «Había incluso masking tape y scotch», declaró el organero; y el 40% de sus 1.512 tubos estaba dañado, principalmente, por desencolamiento. Su intervención incluyó la restauración de todos los tubos dañados y la construcción de los 22 tubos que faltaban. Además, «se construyó un registro nuevo, completo, para el pedal: una trompeta de ocho pies. Y se hizo un cambio del sistema neumático del órgano, se cambiaron todas las membranas y las válvulas del órgano», detalló Carlos Valdebenito (ver nota aquí).

¿Es la primera vez que usted postula a un fondo concursable?

«Bueno, habíamos postulado para hacer un concierto en Saint Paul’s, pero eso no fue aprobado. Y ahora sí. Anteriormente, cuando existían los conciertos itinerantes una vez también fui apoyado por el Ministerio de Educación, pero fue hace muchos años».

La producción fonográfica Hitos Sonoros: Órgano en Chile fue financiada por el Fondo para el Fomento de la Música Nacional 2022 y es el primer volumen de una serie que busca poner en valor los órganos de tubo que existen en nuestro país. Las grabaciones se realizaron en agosto y septiembre del año pasado, desde las 10 a las 14 horas, cuando la iglesia estaba cerrada y eso permitía grabar .En noviembre se realizará el lanzamiento de la versión en vinilo. 

El repertorio registrado por Italo Olivares fue Toccata Prima de la colección Apparatus Musico-Organisticus (1690) de Georg Muffat (1653-1704), tres piezas de Johann Sebastian Bach: el Preludio Coral Nun komm, der Heiden Heiland, BWV 659, Preludio y Fuga en Si Bemol mayor BWV 560, y Preludio en Sol Mayor, BWV 568. Se suma el Postludio en Fa mayor de Theodor Stern (1803-1886), Tiento de Primer Tono de mano derecha de Pablo Bruna (1611-1679); Batalla de sexto tono de Pedro de Araújo (c.1640-c.1705) y Cantilène nuptiale de Théodore Dubois (1837-1924).

La producción artística del disco es de Luis «Toto» Álvarez, director de Acéfalo Records, y Rodrigo Leiva fue el asistente de producción. La grabación, mezcla y masterización son de Rodrigo Figueroa, de Estudios Delcírculo, las fotografías, el registro documental y el diseño, de Luis «Toto» Álvarez. El diseño y diagramación, son de María Paz Jones. Y Carlos Valdebenito estuvo a cargo de la afinación y preparación del órgano. La grabación fue posible gracias a la Congregación de la Parroquia de Lourdes en Viña del Mar.

Italo Olivares Cañete cumple este año cuatro décadas formando a nuevas generaciones. Siempre tiene más estudiantes que de piano que de órgano, eso sí. «De órgano es difícil, porque el instrumento no lo pueden tener en la casa. Sin embargo, he tenido varios alumnos buenos de órgano, y de piano muchos más. Mi historia como pedagogo data desde 1983», comenta.

En la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, su profesor de piano fue Carlos Botto, y los de órgano fueron Carmen Rojas y Miguel Letelier. «Era excelente como organista y como profesor; abarcaba toda la literatura musical y era un compositor muy bueno», declaró Italo Olivares cuando falleció Miguel Letelier, Premio Nacional de Música, en 2016, a los 77 años.

Para rendirle un homenaje como corresponde, rápidamente consiguió la autorización para ofrecer, diez días después, un concierto tributo en los Padres Franceses de Valparaíso, es decir, en el Cavaillé-Coll que su maestro consideraba uno de los dos mejores de Chile. Abordó entonces La natividad del Señor de Messiaen, porque «él la apreciaba y era fanático de Messiaen», dijo entonces (ver nota aquí).

Además, Italo Olivares ha estudiado con múltiples maestros internacionales, ha actuado en las Semanas Musicales de Frutillar, y ha dado giras por Argentina, España, Alemania.

Tuvo el honor de actuar en 2004 cuando se reestrenó el órgano Cavaillé-Coll (1871) recién restaurado en los Padres Franceses de Valparaíso, cuando se inauguró el recién restaurado órgano de la Parroquia de Viña del Mar, en 2008 y, además, actuó en 2012 en la Catedral de Santiago de Compostela.

En 2013, fue el único organista chileno seleccionado para ser parte de la conmemoración mundial de los 850 años de la Catedral de Notre Dame de París, cuyo órgano fue construido por Aristide Cavaillé-Coll en 1868, en una actividad global conocida como el Día Mundial del Órgano. Se hicieron 850 conciertos simultáneos en 44 países. Italo Olivares dio un concierto en la Iglesia Anglicana Saint Paul’s de Valparaíso. «Es un honor ser el único representante de Chile en el Día Mundial del Órgano», declaró entonces, cuando iba a interpretar piezas de Clerambault, Balbastre, Bach y Franck, y transcripciones de Wagner y Verdi (ver nota aquí).

Asimismo, en 2016, fue invitado al nonagésimo cumpleaños de su maestra Monserrat Torrent, y actuó en esa ocasión en el Palau de la Música de Barcelona. Después actuó en la Iglesia Luterana de la Paz en Dachau, Alemania, en 2017, en el gran órgano de la Catedral de Santa María la Real de la Almudena de Madrid, en 2018, y en la Iglesia de San Juan en Hannover, en 2019.

Es docente de las cátedras de piano y órgano en el Centro Cultural Profesor Miguel Pizarro de Viña del Mar, y además dicta clases particulares en ambos instrumentos en Santiago y la Región de Valparaíso.

¿Cómo se interesó por el órgano? Sé que usted entró a estudiar a la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, pero imagino que entró primero a piano y después siguió con órgano, ¿no?

«Oí un concierto de órgano cuando estaba en el colegio, me maravilló y ahí entré a estudiar en la Facultad de Artes en la Chile con Carmen Rojas y después con Miguel Letelier. Después hice muchos posgrados con mi maravillosa maestra Montserrat Torren, que todavía está vigente. Tiene 97 años y da conciertos por todas partes».

¿En qué colegio estaba, era en Viña? ¿Cuántos años tenía cuando escuchó su primera concierto de órgano?

«Acá en Viña, en un liceo que está en Recreo. Tenía como quince años».

¿Y se acuerda de cuál iglesia era?

«Claro, era la Union Church, ahí en Viña».

Y eso lo hizo decidirse por el órgano… Es impresionante.

«Bueno, siempre estudié piano desde chico en el Conversatorio de Viña; mi mamá también había estudiando piano así que siempre me apoyó. Después ya entré a estudiar en Santiago; saqué el grado de licenciado en música con mención en piano, solfeo y armonía, pero también el de intérprete superior en órgano».

No cambiaría el órgano por nada, ¿no?

«No, yo creo que no, porque me satisface mucho el instrumento, tocarlo, y gracias a Dios, puedo dar conciertos todavía, a pesar de mis problemas de salud. No lo cambiaría por nada».

Usted está muy activo en el ciclo Música en las Alturas de la Iglesia Saint Paul’s.

«Sí, ahí me toca un concierto una vez al mes».

¿De cuál iglesia es usted el organista titular?

«Soy titular del órgano de la Iglesia Anglicana Saint Peter’s, que es de la colectividad británica de Viña del Mar».

¿Ahí también da conciertos o es sólo de uso litúrgico?

«No, ahí solamente litúrgico, porque es un órgano electrónico. Antes había uno de tubos, pero lo sacaron y tienen un órgano electrónico».

Coordenadas
Lanzamiento del disco Hitos Sonoros: Órgano en Chile (Acéfalo Records), con recital de Italo Olivares Cañete. 19 horas, jueves 15 de junio. Parroquia Lourdes de Viña del Mar (San José Oriente 72, esquina Agua Santa). Acceso liberado.

Por Romina de la Sotta Donoso | 12-06-2023.