Es uno de los conciertos más esperados de todo el año, para la comunidad UC. Suele actuar un conjunto orquestal y, en los últimos años, cuenta con un director invitado que tiene una significativa carrera tanto dentro como fuera de nuestro país.

Este año, el Concierto de Aniversario UC volverá a conmemorar el Día del Sagrado Corazón y celebrará, además, los 136 años que cumple la Pontificia Universidad Católica de Chile. El director invitado será Emmanuel Siffert, premiada y reconocida batuta de origen suizo, y se eligieron dos obras especialmente queridas por el público, ambas creadas por uno de los artistas más admirados de todos los tiempos: Ludwig van Beethoven.

El Concierto de Aniversario UC se realizará a las 19:30 horas del jueves 6 de junio en el Salón Fresno del Centro de Extensión Alameda UC (Alameda 390, inscripción gratuita). Además, habrá una segunda función a las 19:30 horas del sábado 8 de junio en la Catedral Metropolitana de Santiago (Plaza de Armas 498, inscripción gratuita).»

«Tendremos a dos Beethoven, uno temprano y uno más maduro», adelanta Emmanuel Siffert. «El público escuchará la alegría de un joven Beethoven, que está todavía en el Clasicismo, con su Primera Sinfonía, y un Beethoven que ya está en el prerromántico con el Concierto para piano nº5», agrega el director titular de la Orquesta de Cámara de Chile.

El Concierto Emperador, que está en el subconsciente colectivo de toda la humanidad heredera de la cultural occidental- contará como solista con el profesor Luis Alberto Latorre, solista de piano de la Orquesta Sinfónica Nacional de Chile y Premio Presidente de la República 2016.

Junto con ellos actuará una orquesta conformada por 20 estudiantes del Instituto de Música UC, un exestudiante y ocho profesores, más dos intérpretes invitados.

«Beethoven es el más significativo compositor de su época y uno de los compositores fundamentales en la historia de la música», reconoce Emmanuel Siffert. Pero aclara que es también parte de la tradición, junto con otros que también hacen aportes al repertorio sinfónico.

«Beethoven toma un motivo musical y logra hacer un verdadero castillo»

Emmanuel Siffert

El director suizo explica que la Primera Sinfonía de Beethoven marca un momento crucial en el desarrollo de ese género, como parte de un proceso que se había iniciado con Joseph Haydn y sus últimas sinfonías de Londres, y que por eso «es muy significativa en la historia de la sinfonía». En ella, indica, «está presente un espíritu clásico». Sin embargo, las propuestas de Beethoven en cuanto a la forma, la instrumentación y los movimientos, fueron clave. «En Haydn, por ejemplo, tenemos siempre todavía un minuetto como tercer movimiento, y Beethoven lo cambia por un scherzo«, puntualiza.

Emmanuel Siffert destaca especialmente el trabajo que hace Beethoven con los motivos musicales. «¡Toma un motivo y logra hacer un verdadero castillo!».

En su Primera Sinfonía, Beethoven hace tempi inusuales, la instrumentación es poco habitual para ese momento, con tantos vientos, y está la novedosa inclusión de un scherzo. ¿Son esas cosas son significativas?

«Sí, claro. Ya no es más el minuetto, que habíamos tenido antes, sino que aquí hay un scherzo, y que le da un carácter distinto. Ésa es una diferencia significativa, porque en las sinfonías de Haydn, por ejemplo, todavía había minuetto. El cuarto movimiento tiene mucho canto y una filigrana muy fina. Y la introducción de la Primera Sinfonía empieza con armonías no usuales, empieza con un acorde de dominante, con la séptima, y eso ya es una sorpresa. Todos estos cambios son muy interesantes en esta sinfonía, y representan un desarrollo».

 El Concierto para piano nº5, Emperador, podríamos llamarlo concierto sinfónico, ¿no?

«Sí, claro. Porque la orquesta está muy involucrada en la textura, con el piano. Hay un diálogo maduro entre piano y orquesta».

¿Eso es bastante innovador para la época o ya había varios ejemplos?

«Hay más ejemplos; su Cuarto Concierto también es así. Pero Beethoven siempre es tan elaborado en sus armonías y en la forma, que incide profundamente en la historia de la música. Lo hace en una época en que se están dando cambios en el género».

El Concierto Emperador fue el primero que no estrenó el propio Beethoven como solista, debido a su avanzada sordera. El estreno estuvo a cargo de su discípulo, Carl Czerny. «Él fue uno de los pianistas pedagogos más importantes de la época, y también fue compositor, hizo varias sinfonías. Lamentablemente, hoy sólo se conocen sus obras para piano», comenta Emmanuel Siffert.

Carl Czerny es una figura central de la tradición pianística, pues conecta el legado que heredó de Beethoven con su propio discípulo Franz Liszt, herencia que éste legó a su alumno Martin Krause, y éste a Claudio Arrau.

Luis Alberto Latorre (1959) es uno de los pianistas más reconocidos de nuestro país. Premio Presidente de la República 2016, es solista de la Orquesta Sinfónica Nacional de Chile. Y ahora tendrá el rol solista en el Concierto Emperador de Beethoven, una obra que define como «reflexiva, muy introspectiva e íntima.

¿Cuáles características destacaría del Quinto Concierto para piano de Beethoven? Es una obra que tiene algo particular en su carácter propiamente sinfónico? ¿Qué diría que lo distingue?

«Éste es el último concierto, número 5, de Beethoven. Ya ha escrito cuatro, entre ellos el célebre Cuarto Concierto, que quizás sea el más innovador. El Quinto Concierto resume el típico formato de piano solista con una orquesta que lo acompaña, con un gran despliegue virtuosístico y con cadencias. Es bastante tradicional en ese sentido. Y refleja la madurez en la composición de un Beethoven que está bordeando los 40 años, y por cuyo cuerpo ya han pasado varias obras notables. El segundo movimiento es realmente maravilloso, por el tratamiento del color, del matiz, del ambiente. Le coloca varias indicaciones, como ‘íntimamente’ y ‘muy dolce’. Se nota que ahí hay una búsqueda, porque incluso su tonalidad es muy distinta al primer y tercer movimiento. Está en una tonalidad lejana.

¿Lejana en el sentido de muy distinta?

«Claro, el concierto está en Mi bemol mayor y el segundo movimiento está en Si mayor, que técnicamente hablando es ‘el napolitano’ de la dominante. No es el típico segundo movimiento en un tono menor, sino que se da una relación armónica bastante distinta y osada para la época».

La música de tradición escrita, en esa época, estaba viviendo profundos cambios transformadores. «Desde Mozart para adelante, es cada vez hay más osadías armónicas que van a terminar por desestabilizar la tonalidad en el término del Romanticismo e incluso, posteriormente, llegar a la atonalidad. Eso es un camino transicional que todos los compositores fueron dando, paso a paso a través de osadías como el hecho de que este movimiento esté en Si mayor».

Para Luis Alberto Latorre no hay dudas. «Es uno de los conciertos más famosos de Beethoven. El público inmediatamente se va a reencontrar con una música que les va a fascinar», indica. Y detalla que su partida es impactante: «Comienza con esta cadencia enorme y con una gran orquesta. Es uno de los conciertos más importantes y más favoritos de todos los pianistas, todos en algún momento queremos tocar este concierto, así que estoy muy contento de participar además, en este aniversario de la Universidad Católica, nada menos que con este concierto maravilloso que produce una inyección de energía, de vitalidad tremenda».

Este Quinto Concierto de Beethoven, ¿lo ha interpretado hartas veces? ¿Cómo lo ha visto a través del tiempo, a través de su vida?

«Sí, varias veces. Siempre ha sido muy grato tocarlo. Es el único que Beethoven no estrenó, pero yo creo que fue por la sordera. Se nota que Beethoven tocaba muchísimo piano, está muy bien escrito para el instrumento, por lo tanto le da mucho placer al pianista. Hay un diálogo con la orquesta y es muy entretenido, con momentos increíbles. Lo he tocado varias veces desde hace varios años y siempre sigue siendo un desafío, yo diría que es bastante difícil tocarlo, tiene hartas dificultades».

La repetición del Concierto de Aniversario será en la Catedral de Santiago, el sábado 8 de junio. Es imposible no recordar cuando Claudio Arrau tocó ahí el Concierto Emperador, hace 40 años, en su última visita a Chile. «Ese concierto fue fantástico. Fue memorable. Pero no hay nada que se le parezca», asegura Luis Alberto Latorre.

El pianista recuerda también dos concierto que hubo en la Catedral en 2011: la Sinfónica con Michal Nesterowicz en la Segunda Sinfonía de Gustav Mahler, y la Misa en Si menor de Johann Sebastian Bach que condujo Juan Pablo Izquierdo, con la Orquesta de Cámara de Chile. «La Catedral es un lugar de encuentro cultural y musical, totalmente», dice.

Respecto de trabajar con una orquesta que integran estudiantes y profesores del Instituto de Música UC, Luis Alberto Latorre señala que «es como tocar en familia, porque seguramente varios intérpretes son o han sido alumnos míos, y están también algunos colegas profesores».

¿Le ha tocado trabajar con Emmanuel Siffert? ¿Lo ha visto en concierto?

«Nunca hemos trabajado juntos, pero lo conozco. Lo he visto en conciertos con la Orquesta de Cámara de Chile, es muy buen director, y conozco a mucha gente de la orquesta que me dice que es muy buena persona, además de muy buen músico».

Luis Alberto Latorre destaca también que estos conciertos de aniversario UC serán especiales, pues serán los últimos en el mandato del rector Ignacio Sánchez. «Él es una persona muy culta y melómana, le encanta la música, en especial Beethoven y el Concierto Emperador. Agradezco la gentileza de que pensaran en mí y participar en esta despedida afectuosamente, tocando el piano lo mejor que puedo», indica.

Asimismo, el profesor participará el viernes en la mañana en la celebración del Día del Sagrado Corazón, en el Salón Fresno, en una sesión extraordinaria ampliada del Honorable Consejo Superior UC.  «Como el rector Sánchez es muy aficionado a Beethoven, voy a tocar un movimiento sonata de Beethoven y un nocturno de Chopin.

¿Qué es lo revolucionario en Beethoven? ¿Es él como artista, o es que muchas de sus obras son innovadoras?

«Son muchas cosas innovadoras. Él, de niño, recibe todo el peso de la tradición clásica. Si te fijas, las últimas obras de Beethoven están completamente en otra dimensión. Está la ruptura de los formatos, por ejemplo, del plan sonata, que siempre era con el segundo tema en el quinto grado, y él empieza con el tema en el tercer grado, que es la tónica paralela, etcétera. Y así, en realidad hay mucha revolución en cuanto a la escritura. Desde sus primeras obras a las últimas, en Beethoven hay una evolución tremenda. Entonces yo diría que le calza el término revolucionario».

La amplia ciudadanía sabe que Beethoven afirmó su derecho a ser un artista independiente, o sea, no sólo escribir por encargo lo que le pedían. Por el contrario, se arriesgó a vivir en pobreza para poder hacer un arte autónomo. Acusó la banalidad de su época y luchó por un concepto de arte. ¿Qué tan importante es una figura creativa como él, que se sostuvo sobre su propia creación y no sobre las modas, para crear?

«Beethoven vive en una una época bastante difícil. Estaba lleno de revoluciones y de guerras, la invasión de Francia, por ejemplo. Justamente hacia 1810 Francia invade Viena y él, que está en Viena, alega que el ruido de los cañones lo está dejando más sordo todavía de lo que estaba. Pero es ejemplar la tenacidad y la constancia de no rendirse jamás a lo que él quiere componer. Los editores le decían ‘¿Cuándo volverás al Beethoven de la Claro de Luna, el Beethoven de la Patética?’ Él empezó con una escritura muy osada para la época y las últimas obras de él son absolutamente extemporáneas para el momento. Sin embargo, él jamás renuncia a la escritura, a lo que él piensa que se tiene que hacer».

También es relevante en cuanto con sus acciones y obras permite que el arte se siga desarrollando, ¿no?

«Claro. Él abre las puertas a un mundo nuevo, a una nueva sonoridad, a una nueva escritura musical, que se conoce como Romanticismo.

Cuando compone el Concierto Emperador, Beethoven tenía cerca de 40 años, era un hombre maduro, con problemas de audición y sin embargo expresa un vigor juvenil.

«La tenacidad y la voluntad en seguir escribiendo a pesar de la sordera, de todos los males que tiene, de la pobreza, es increíble en Beethoven. No hay que olvidar que en algún momento él incluso piensa en el suicidio. Sin embargo, él mismo lo dice, es la música la que lo salva. Es la música la que lo rescata y lo hace sobrevivir y seguir adelante».

Luis Alberto Latorre: versatilidad y gestión artística

Además de profesor de música de cámara del Instituto de Música UC y solista de la Sinfónica de Chile, Luis Alberto Latorre es director artístico del Ciclo de Piano que se realiza en el Teatro Universidad de Chile. Además de haber organizado y protagonizado un ciclo de homenaje a Claudio Arrau a 40 años de su última visita a Chile, en la Biblioteca del Congreso Nacional, Luis Alberto Latorre estuvo a cargo de la apertura de la 60a Temporada de Cámara UC, a inicios de mayo, con repertorio chileno de compositores que fueron parte del Grupo de los Diez (ver nota).

 Luis Alberto Latorre volverá a la sexagésima edición aniversario de la Temporada de Cámara UC con el estreno absoluto de Variaciones de Gustavo Becerra Schmidt y tríos de Friedrich Kuhlau y Bohuslav Martinu, a fines de julio, y a fines de septiembre abordará con Georgina Rossi las Sonatas n°1 y n°2, Op.120, de Johannes Brahms. En octubre tendrá dos actuaciones protagónicas. Será parte de dos conciertos de homenaje a Arnold Schoenberg a 150 años de su nacimiento, con Pierrot Lunaire, los 6 Orchesterlieder y la versión de cámara que hizo Schoenberg de Canciones del Caminante de Gustav Mahler en la versión de Arnold Schoenberg.

«Estoy muy honrado por la invitación para dirigir el Concierto de Aniversario de la Universidad Católica»

Emmanuel Siffert

Emmanuel Siffert asumió la titularidad de la Orquesta de Cámara en octubre de 2002. Y la temporada 2023 de este elenco que depende del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio fue elegida entre lo mejor del año por el Círculo de Críticos de Arte de Chile.

Entre sus últimos conciertos con la Orquesta de Cámara de Chile, han abordado un variado repertorio que combina grandes hitos de la literatura con obras menos conocidas en la actualidad. Así, en el caso del programa francés de mediados de mayo, contrapuso a Gabriel Fauré, Maurice Ravel y Claude Debussy- éste último a través de una atractiva versión orquestal de Claro de Luna- con piezas de Rodolphe Kreutzer y René Gerber. «Esta mezcla de obras de tradición y obras nuevas le da oxígeno al repertorio para el público», asegura.

«Estoy muy honrado por la invitación para dirigir el Concierto de Aniversario de la Universidad Católica. Creo que ha sido el resultado del trabajo que estoy haciendo con la Orquesta de Cámara de Chile, y del trabajo que estuve haciendo en mayo con el curso de práctica orquestal de la UC», señala Emmanuel Siffert.

El año pasado, el director suizo trabajó como profesor invitado en el curso de práctica orquestal. Prepararon la Suite nº1 de Peer Gynt, de Edvard Grieg, el Intermezzo de la ópera Cavalleria Rusticana, de Pietro Mascagni, y la Suite nº1 de la ópera Carmen, de Georges Bizet. Este repertorio luego lo interpretaron los 50 estudiantes y el director en dos conciertos en Puente Alto y La Pintana (ver nota). «Fue una experiencia muy buena», dice

Durante mayo pasado, en tanto, en el mismo curso prepararon oberturas orquestales de La Forza del Destino y de Nabucco, de Giuseppe Verdi, la Marcha Eslava de Piotr Ilich Tchaikovsky y la obertura de la ópera Ruslán y Liudmila de Glinka.

El viernes 9 de junio, entre las dos funciones dedicadas a Beethoven que hará con elencos de la UC, tiene una presentación de hecho con su orquesta, en el Teatro California. El programa es igual de interesante, con la Tercera Sinfonía de Louise Farrenc y dos piezas latinoamericanas que incorporan ritmos vernáculos; Aires de candombe de Tito Oliva (Argentina) y Vilama, la muerte del río de Carlos Zamora (Chile), además de Ingoma de Hendrik Hoffmeier (Sudáfrica). Ese mismo programa lo presentarán en gira por la Región de Tarapacá desde el martes 11 al viernes 14 de junio (ver más información).

Por Romina de la Sotta Donoso | 04-06-2024 | Nota originalmente publicada en musica.uc.cl.