Teatro UC: Verbatim, de Muriel Miranda
El montaje desafía los límites entre cuerpo y voz a través del lipsync como recurso escénico.

En su segunda temporada, la obra Verbatim, que cuenta con dirección y dramaturgia de Muriel Miranda, se pone en escena en el Teatro UC, desde el 29 de mayo al 21 de junio. Tendrá funciones a las 20 horas de jueves a sábado, en Jorge Washington 26, Plaza Ñiuñoa.
Entradas en boletería por $14.000, general; $7.000 para estudiantes y personas con discapacidad; $8.400 para personas mayores, y $9.800 para todos el jueves.
La disociación entre voz y cuerpo ha sido una tensión latente desde los orígenes del cine sonoro, cuando las limitaciones técnicas obligaban a proyectar imagen y sonido por separado. De esta fractura histórica nace Verbatim, obra escrita y dirigida por Muriel Miranda Gacitúa, que se instala en esa grieta para explorar las posibilidades escénicas del lipsync como recurso narrativo, técnico y filosófico.
En latín, verbatim significa la reproducción exacta de una frase, cita o texto. Este principio da origen a una experiencia teatral única: los actores interpretan sobre una pista de audio previamente grabada, realizando un ejercicio milimétrico de sincronía labial. Durante los 57 minutos que dura la función, la escena se convierte en un campo de prueba donde la voz, el cuerpo, la identidad y la percepción se entrecruzan, cuestionando los límites entre lo real y lo representado.

La trama nos presenta a Ana y Leo, dos amigos que comparten departamento. Ana comienza a tener sueños recurrentes donde es otra persona atrapada, sin memoria, que parece necesitar ayuda. La llegada de Laura, hermana de Leo, intensifica el enigma: Ana sospecha que Laura es la mujer de sus sueños, aunque esta última padece un trastorno de personalidad que le impide comunicar la verdad con claridad. Dentro de ella habita “la voz”, una entidad que toma control de sus pensamientos y comienza a influir en quienes la rodean.
“Me interesaba profundamente experimentar con ese traspaso. Verbatim significa el traspaso de una frase u oración de un medio a otro. Pensaba mucho en un cuerpo con una voz que no le pertenece, y en la construcción del personaje a través de esa premisa, tomando elementos combinados. Ya que la voz en sí misma propone cosas y un cuerpo las contiene. Es interesante para mí lo que sucede en ese tratar de contener. Además, la obra trata de una cuarta voz que se cuela entre esas voces y de sus voces interiores. Es una obra a muchas voces”, comenta Muriel Miranda, dramaturga y directora de la obra.
Esta inquietud por explorar el lipsync y las posibilidades técnicas del desajuste entre cuerpo y voz viene de una trayectoria previa. “Me interesa mucho la exploración sobre metodologías o recursos técnicos, en este sentido el lipsync. Creo que después de la obra Continuidad de las cajeras de Jorge Contreras (XX Muestra Nacional de Dramaturgia 2022), en que a ratos exploré con lipsync y donde toda la obra era una grabación también, y un paisaje sonoro, quise dar continuidad a esta exploración, desarrollando las posibilidades técnicas y actorales de este traspaso. En Compañía Maleza, con Maleza y Un poco Invisible, hacíamos doblaje en vivo de muñecos en stop-motion. Hay un claro interés que creció sobre todo después de un Magíster en Artes Visuales que hice en la Universidad de Chile, donde realicé ejercicios con un cuerpo y otra voz, pero en animación”, explica la directora. Esta línea de trabajo se profundizó con la investigación escénica liderada por el artista visual Gonzalo Aguirre entre 2021 y 2023, gracias a un Fondo de Residencias de Artes Escénicas del MINCAP.
La pregunta central que atraviesa Verbatim es tan antigua como el teatro mismo: ¿quién habla cuando se habla? ¿De quién es esa voz? ¿Quién la contiene? El lipsync funciona aquí como dispositivo para descomponer lo que escuchamos, y la obra se instala en el intersticio entre "lo que se dice" y "lo que se piensa", generando una constante atmósfera de sospecha. Así, la multiplicidad de voces, propias, ajenas, interiores y suplantadas, se convierte en un juego de espejos que transforma radicalmente la experiencia del espectador.

RESEÑA. Ana y Leo son dos amigos que comparten un departamento. Ana siente que está fuera de su propio cuerpo y comienza a tener sueños recurrentes donde es otra persona. Aunque los sueños parecen típicos, Ana percibe que contienen un mensaje: la mujer en sus sueños, que parece ser ella misma, está atrapada, sin memoria, y necesita su ayuda, o tal vez es Ana quien debe entender qué ocurre. La llegada de Laura, hermana de Leo, intensifica este misterio. Ana cree conocerla y sospecha que Laura es la mujer de sus sueños. Laura, sin embargo, padece un trastorno de personalidad que la incapacita para decir la verdad, lo que la lleva a hablar lo menos posible. Dentro de ella habita “la voz” una entidad que toma control de sus pensamientos y comienza a influir en las mentes de quienes la rodean.
Información: Montes Comunicaciones.
Programa
Ficha artística
Dramaturgia y dirección: Muriel Miranda Gacitúa | Colaboración dramatúrgica: Alejandra Moffat Varas | Investigación: Gonzalo Aguirre Zaldívar | Actuación: Natalia Valladares Farrú, María Siebald Morgan y Daniel Marabolí Bernales | Voces: Camila González Brito y Matteo Citarella | Diseño Sonoro y edición: Pablo Otárola Pino | Diseño escenográfico: Gonzalo Aguirre Zaldívar | Diseño de vestuario: María José Venegas | Diseño de iluminación: Zoe Hihler | Producción: Muriel Miranda Gacitúa | Comunicaciones: Macarena Montes | Colaboradores: Espacio Checoslovaquia, GAM y UNIACC.