Iconoclastas, de Francisca Palma
La novela transcurre en Alto Hospicio en vísperas de un 21 de mayo y será presentada por Arelis Uribe y Daniela Catrileo en Casa Taller Teatro Sur.

Las escritoras Arelis Uribe y Daniela Catrileo presentarán Iconoclastas, de la periodista Francisca Palma, el viernes 31 de mayo en Casa Taller Teatro Sur. El libro, publicado por la editorial iquiqueña Navaja, se adentra en el imaginario de Alto Hospicio y cuestiona las formas que ha ocupado el Estado para promover el concepto de nación en una región extrema como lo es Tarapacá. “En el norte hay un escenario de disputas culturales muy rico para imaginar”, dice
la autora.
Pocos días antes de ese 21 de mayo, en algún punto de los inicios de la década del 2000, las autoridades de Alto Hospicio están desesperadas: ha desaparecido el busto de Arturo Prat frente al cual desfilan cada año estudiantes, centros de madres, cuerpos de bomberos, organizaciones sociales y hasta guaguas en coche empujadas por sus educadoras de párvulos. Este es el escenario donde se sitúa la historia de Iconoclastas (Editorial Navaja, 2024), una
novela de la escritora y periodista Francisca Palma (1989) que cuestiona la forma en la que se ha promovido e instalado el Estado Nación en una zona extrema como lo es la región de Tarapacá, donde ella misma creció.
En Iconoclastas conviven tres voces: Michael Mamani, un estudiante de ascendencia aymara a quien siempre han molestado por eso, hasta el punto de decirle “paisano”; su abuela Graciela, que llegó a Alto Hospicio desde Enquelga –poblado del altiplano tarapaqueño– en busca de oportunidades laborales luego del proceso denominado como chilenización de Tarapacá; y Manríquez, un compañero de curso de Michael con quien comparte la micro para volver del preuniversitario. Como sus apellidos están seguidos en la lista, les toca hacer los trabajos del colegio juntos en su último año de enseñanza media en un liceo de corte católico.
Luego de un primer lanzamiento en Iquique el 10 de mayo, el libro será presentado en Santiago este viernes 31 por las escritoras Arelis Uribe y Daniela Catrileo, en un evento que tendrá lugar a las 19:00 horas en Casa Taller Teatro Sur (Maipú 353, Barrio Yungay). La autora también lanzará el fanzine La Huerta, del naciente proyecto Blueditorial.
Cuando publicó Iquique Glorioso. Crónicas de la tierra de campeones (Ediciones Radio Universidad de Chile, 2016), Palma ya llevaba un año trabajando en la idea de Iconoclastas, una historia ficticia que nace de un mito urbano que le contó su hermano cinco años mayor: existía el rumor de que alguna vez se habían robado el busto de Prat.
Mucho del trabajo de investigación periodística e histórica que realizó para la elaboración de ese primer libro de crónicas sobre la ciudad nortina –que fue su tesis de periodista de la Universidad de Chile– entró en esta novela. Se aborda, por ejemplo, la chilenización de la Región de Tarapacá y el trabajo del geógrafo Freddy Taberna, que fue asesinado por la dictadura, cuyo plan de desarrollo para los pueblos del interior se proponía –entre otras cosas–, integrarlos al proceso de la Unidad Popular, y que pudieran vivir y desarrollarse en su tierra originaria. Aparece también la explosión de la fábrica de armamento de Carlos Cardoen, que ocurrió en 1986.

“Temí que se tomara como un anecdotario, pero también creo que es bueno que sea un anecdotario cultural, porque hay gente que no tiene cómo imaginárselo. Es lo que vio mi generación, porque ese desfile que yo describo –donde desfilan centros de madres y guaguas en coche– yo lo vi. Era absurdo, pero también muy folclórico. La idea tampoco era romantizarlo, pero sí visibilizar que eso realmente pasaba y para todo el mundo estaba bien, y además sigue
pasando: la mañana del lanzamiento en Iquique, mi hermano me mandó un video de mi sobrino desfilando. Seguimos en lo mismo, es un imaginario muy militarizado”, dice la autora.
Pese a que migró a Santiago para estudiar Periodismo en la U. de Chile, Palma sigue situando su voz narrativa en el norte. “Es un lugar que sigue siendo muchas cosas a la vez y que tiene un enorme potencial cultural. Creo que hay un escenario de disputas culturales muy rico para imaginar. Cada lugar vale la pena para ser narrado, pero las regiones tienen especialmente un valor particular, y esta es una región extrema, una región pobre, una región que ‘no importa’ en el imaginario social. Este libro trata de decir que hay más que eso. Puede que ese ‘algo’ no necesariamente sea mejor, pero es mucho más”, explica.
Actualmente Francisca Palma está escribiendo un compendio de cuentos sobre el norte y un poemario acerca del desierto. Además, la autora trabaja en un proyecto de arte textil llamado “Bordado de una herida abierta”, donde retrata los rostros de las niñas y mujeres víctimas de Alto Hospicio con hebras de cabello femenino; trabajo que fue presentado en su estado de proceso en el Primer Festival de Arte Contemporáneo de Tarapacá (RUCO), en febrero del 2021.