Fue en 2013 la última vez que se presentó el ballet Carmen en el Teatro Municipal de Santiago. Expresiva y dramática, la versión de Marcia Haydée de la obra original de Prosper Mérimée podría condensarse en la frase “No quiero que me atormenten, ni mucho menos, que me manden. Yo quiero ser libre”, pronunciada por su rebelde protagonista ante el afán de Don José por someterla.

Después de su postergación en 2020 a causa de la pandemia, el Ballet de Santiago finalmente trae de regreso este clásico de su repertorio a partir del 17 de mayo, dando comienzo formal a una temporada que ya tuvo su primera actividad en el Teatro Municipal de Chillán, con la presentación de "Noche Tchaikovsky". Pero además, con renovadas duplas de bailarines en los roles de Carmen y Don José.

Funciones a las 19:00 horas de martes a jueves, y a las 17:00 horas del sábado, hasta el 28 de mayo, en Agustinas 794, con entradas desde $5.000.

"Carmen es un ballet muy especial para el Ballet de Santiago. Fue creado por Marcia Haydée para la compañía y ha sido interpretado en diferentes países con gran éxito. Como director, es muy gratificante contar con los bailarines Katherine Rodriguez, Emmanuel Vázquez, Romina Contreras y Gustavo Echevarría en los roles principales; jóvenes talentos que interpretan a Carmen y Don José por primera vez. Invito a todas y todos a venir y disfrutar de este primer ballet de la temporada 2022 y maravillarse con el talento del Ballet de Santiago”, señala el director artístico de esta compañía, Luis Ortigoza.

La interpretación de la música de Georges Bizet, con arreglos de Albena Dobreva, estará a cargo de la Orquesta Filarmónica de Santiago dirigida por su director residente, el maestro Pedro-Pablo Prudencio. La escenografía y el vestuario desplegados en el escenario, son diseño Pablo Núñez; y la iluminación, de Ricardo Castro.

Creada para el Ballet de Santiago por Marcia Haydée en 2004, Carmen se ha ganado un lugar central en el repertorio de la compañía. La visión creativa de Haydée, así como el potencial artístico de los bailarines, reviven siempre con emoción una historia que lleva al escenario la vida de una mujer que se define por su deseo personal de libertad, en contraposición a otras protagonistas femeninas del Romanticismo francés.

Musicalmente, Bizet tomó danzas como la jota aragonesa, la sevillana o la seguidilla para componer la ópera en que se inspira este ballet, además de recoger rasgos instrumentales e idiomáticos propios de la música folclórica española. Entre las arias, una de las más recordadas es “El amor es un pájaro rebelde”, que en la coreografía de Haydée tan bien perfila, desde el punto de vista expresivo y dramático, el tipo de mujer que es Carmen: gitana, sensual y empoderada. Una mujer de nuestros tiempos.

Información: Teatro Municipal de Santiago.